UNA PELA DE SUPERHÉRORES

Con el estreno de “Superman: El hombre de acero”, se reavivó la polémica sobre quién es más héroe que quién. Y hay un dato que no puede soslayarse: uno vuela y el otro no. Encima, a ese lo acusan de poco masculino.

Superman

Un hit

Ha pasado mucha coca cola bajo el puente, pero 75 años no es nada y Superman sigue siendo el más grande, poderoso, famoso, importante e invencible de los superhéroes. Para que no queden dudas de que está todo más que bien con que no es un ave, no es un avión, ahora se estrena una película que pese a llamarse “Superman: El hombre de acero” va a destrozar las boleterías.

Un poco de historia (un poquito)

¿Sabían que Superman empezó siendo malo? Además, sus creadores aceptaron que tenía un poco de Tarzán y un poco de Buck Rogers, el más antiguo y despreciado de los héroes pulp. ¿Sabrá Cumbio, donde quiera que esté, quién fue el bueno de Buck? Lo cierto es que además de ciertas mutaciones físicas, Superman no era quien es, sino que en 1933 asomó su plexo solar de villano con brujeril y contagiosa calva indiosolárica (nótese que después peló a Lex Luthor, infrigiéndole la primera de una serie de severas heridas narcisistas). Criaturita producto de la Gran Depresión, Superman no tardaría en abandonar el pesimismo.

Una letra

La “Z” del Zorro es tributaria de la inicial en el pecho de Superman, el símbolo más fuerte hasta el desembarco de la comida chatarra. Un estudio reciente hecho por la Universidad de Minnesota demostró que uno de cada cinco chicos era capaz de reconocer la “S” de Superman, mientras que cuatro de cinco reconocía la “M”, de hamburguesas. Además, la “S” fundacional responde a Siegel y Shuster, los apellidos ilustres de quienes crearon a Superman y la heroemanía.

El crítico

Auque vuela en 3D, el nuevo Superman es más solemne que un concilio vaticano.

Batman

Un hit

El psiquiatra Fredric Wertham afirmó en su libro “La seducción de los inocentes” que “las historias de Batman son psicológicamente homosexuales”. Como su rival de Versus, en un principio Batman también fue un hombretón ominoso que se movía por calles violentas y humo de alcantarillas. Sin embargo, en la década del ‘40 fue volviéndose un poco más doméstico y ya con la llegada de Robin no faltó quien preguntara insidiosamente si a Batman le gustaba que le pegaran y lo llamaran Marta. De ahí en más, Batman fue un artista camp. “Aunque le inventaron a Gatúbela ya es tarde”, sentenció Matías Alé.

Un poco de historia (un poquito)

Esta es buenísima: En el “Batman” de Tim Burton (1989), Kim Basinger quiso desnudarse en una escena “¡Quiero hacerlo, quiero sacarme el vestido!”, gritaba. Según Basinger, la conversación siguió así: Jack Nicholson opinó: “¡Estoy totalmente de acuerdo!, ¡ensayemos esa escena ahora mismo!” Michael Keaton, el Ned Flanders que hacía de Batman, terció: “No, no podemos hacer eso en una película de Batman. Es ridículo”. Basinger: “Entonces quedo en ropa interior”. Nicholson: ‘No, no. Todo, todo, todo...”. Keaton, que además ponía guita en el filme, terminó la discusión: ‘Esto es para niños. ¡No!”. Y así fue que seguimos hablando de “Nueve semanas y media”.

Una cosa

Batmanoides del mundo unido, el murciélago encabeza el Guinness de las Barbies para hombres. Esto quiere decir que su personaje logró 314 formas diferentes de muñecos, seguido por El Hombre Araña. De Mengano, ni noticias. Chin pum.

El adelanto

Se viene el Batman azteca cuyo archienemigo será el revuelto de huazontle con queso.