TWITEA OLLANTA, TWITEA

Por Dante Ramos de Rosas

A muchos analistas políticos y políticos de partidos clásicos les abruma el que el presidente no copie o siga las costumbres de otros que hablaban hasta por los codos. Con o sin twiter.

Asignan la culpa a su oficina de comunicaciones donde ambula Randa Musallah, el que no active respuestas rápidas ante diversos eventos y sucesos de seguro inmanejables. Pero la verdad es que ninguno de ellos se ha puesto a cavilar que es lo que realmente pasa dentro de la cabeza del presidente.

Hay dos factores que desconocen los políticos clásicos y núbiles porque la antropología peruana no es su fuerte más si los paraísos mediáticos como el de la CNN o BBC.

Ollanta estudió en un colegio cercano a la Universidad Católica llamado AELU. A este colegio  iban hijos de japoneses en su mayoría. Ollanta estudio allí los dos niveles. Primario y secundario. El espíritu oriental es el de ser reservado in extremis y ser observador refinado. Esperar antes de atacar. Comunicarse en pequeñas rondas de amigos o círculos familiares. El que Ollanta sea conservador en sus comunicaciones no significa que no sienta lo que pasa a su alrededor.

Revisando un anuario del AELU veo que entrevistan a un amigo de su promoción y uno de ellos cuenta que Ollanta siempre que iba a las reuniones del colegio después de egresado preguntaba por una compañera de origen japonés muy bonita. Le respondieron que se había casado lo cual le causo pesadumbre.

No sabemos si Ollanta ya era casado o no cuando seguía preguntando por el destino de la chica de rasgados ojos. Otro episodio cuartelero en Lambayeque - donde queda la séptima región militar y sede de varias logias civiles y militares como Pro - Marina y la Legión Cáceres -  informa desde un amigo de fuste agrícola que Humala estaba templadazo de una chica de apellido Lezcano de origen aparentemente trujillano aunque de procedencia tumbesina. Hasta donde reporta este amigo mío las Lezcano que eran todas bonitas no le daban bola al joven oficial acantonado en dicha región, lugarcito donde hoy pululan las barracas del Comando Sur USA edificadas por la empresa gringa “Beaver” que en castizo lenguaje significa “Castor”.

Lo otro que hay que decirles a los de la élite política limeña o de Trujillo o de Puno o de Arequipa costeñizados es que Ollanta tiene origen ayacuchano y el ser andino es un tanto callado o hermético y a su vez es afín al mito andino de refugio que consiste en palabras de Imelda Vega Centeno en aconchabarse sobre sí mismo cuando no se es cercano a situaciones que sean familiares.

Recordemos que Humala no tiene propiamente un partido político y no ha activado en vida partidaria porque toda la vida estuvo en un cuartel.  

                    

Mejor dicho en dos. El de la Escuela Militar de Chorrillos y el de su hogar donde reinaba don Isaac Humala suerte de patriarca dueño de sus tesis leninistas sobre depuradas tomas del poder y salvas ideológicas de fogueo y de las otras.

A ver si un día de estos los analistas leen un poco del mito andino de refugio y se explican los silencios de Humala y de algunos pobladores del ande hoy prófugos de la inversión minera. Roque Benavides y sus huestes de medios de comunicación debieran saber de este mito. Revisen el libro de Imelda Vega Centeno grueso como una biblia que versa sobre la historia del Apra y allí verán en lo que Haya creía como mito y como así su partido pudo supervivir tanto tiempo en el alma del poblador común y silvestre.