LOS DDHH HAN MUERTO

Por Miguel Santillana

Estas últimas elecciones han tenido un saldo trágico: país dividido y crispado, amistades rotas y familias desunidas, medios de comunicación que han perdido su credibilidad, periodistas que muestran su verdadero rostro mercenario, lobistas que imponen titulares mientras acomodan a sus clientes con quien salga elegido, profesionales e intelectuales que jugaron su prestigio por programas de gobierno que ni a ellos convencen motivados por antiguos rencores y rencillas, etc. Pero para mí lo más trágico es que el tema de los Derechos Humanos en el Perú ha muerto por el sesgado uso político que le ha dado la Coordinadora y las ONG involucradas en este tema.

Si tomamos las estadísticas de la CVR, fue durante la gestión de Belaúnde (1980-1985), en especial el año 1984 donde hubo más muertos y desaparecidos (19% del total, concentrados principalmente en Ayacucho). Otro pico se da en el año 1989 con la primera administración García, pero esta vez el conflicto se llevó a un mayor número de distritos. Con la captura de Abimael Guzmán en setiembre de 1992, el número de muertos y desaparecidos disminuye secularmente.

Que recuerde nadie le echó en cara estas cifras al Sr. Valentín Paniagua, miembro de Acción Popular, cuando fue presidente transitorio del país o cuando se presentó en las elecciones del 2006. Tampoco vi manifestaciones callejeras tan bien orquestadas y manifiestos de diversos colectivos contra la candidatura de Alan García el 2006, con el agravante que durante su gobierno tuvimos el grupo paramilitar Rodrigo Franco, -por todos los indicios- ligado al partido aprista. Es como si a Alberto Fujimori le hubieran cargado toda la culpa de lo que sucedió en el tema de DDHH en el Perú.

Pero para colmo tenemos la propia justificación de uno de los tótems de los DDHH: “Y en relación a la violaciones de derechos humanos de Madre Mía (punto para mí el más sensible), se puede invocar que -mas allá de que el juez San Martín haya sido el que cerrara el caso, pudiendo haber mandado una mayor investigación- del lado del fujimorismo hay un millón de Madres Mías (comenzando por las matanza hechas por el grupo Colina, creado y protegido por Fujimori-Montesinos”) Ernesto de la Jara Diario 16. Lunes 09 de mayo 2011.

O sea que pasamos a un tema de número de muertos atribuidos al candidato de mi preferencia. Por la posición de su institución, el Instituto de Defensa Legal, en el tema Bagua me parece que también han entrado a la dinámica de que “hay muertos buenos y hay muertos malos”: denunciar a las FFPP y a las autoridades por los hechos de la Curva del Diablo, callar por el asesinato de los policías en la Estación de Bombeo N6.

Fue Francisco Soberón de APRODEH quien salió con la denuncia de Madre Mía, ésta fue investigada principalmente por el Diario La República. Hoy, tanto APRODEH como todas las ONG de DDHH ligadas a la izquierda y el Diario La República, están con Ollanta Humala a pesar que saben de la compra de testigos para que se retracten. Inclusive Omar Chehade, candidato a la vicepresidencia, denunció –para tibiamente desdecirse luego- que fue la CNDDHH la que coimeó testigos para hacer la primera denuncia.

Los DDHH no son una cuestión de números (“nosotros matamos menos”), o que hay “muertos buenos y muertos malos”, o un espolón a ser utilizado para mis intereses políticos. (...) hay que reorganizar la Coordinadora, ampliar los sectores que participan en ella. También es hora de quitar protagonismo a personajes que han medrado del tema por años, que se atribuyen una supuesta superioridad moral. Parásitos hipócritas. (Tomado de Semana Económica).