GOBERNABILIDAD Y TRANSPARENCIA

Por Guillermo G. Guerra Cruz
Acabó la fanfarria pre electoral y las urnas han dicho su palabra, la única, más allá de las encuestas y de las esperanzas y del dinero echado al mar. Ahora, a cumplir las promesas y que éstas no queden en juramentos de perverso enamorado o de vendedor en mercado árabe.
Acabó la fanfarria pre electoral y las urnas han dicho su palabra, la única, más allá de las encuestas y de las esperanzas y del dinero echado al mar. Ahora, a cumplir las promesas y que éstas no queden en juramentos de perverso enamorado o de vendedor en mercado árabe.
Gobierno y Administración son sistemas sociales abiertos aglutinables y desagregables en mayores o menores, dependiendo de la interacción con su medio.
El rol del Gobierno
Hemos elegido a los titulares de los Gobiernos municipal y regional, instituciones descentralizadas del Gobierno Nacional, en las que operan dos macroniveles: Gobierno y Administración y que constituyen lo que denominamos “sociedad política”. La conceptuación no es unívoca y puede ser discutible.
Aquí entenderemos como gobierno la función dirigida a condicionar las relaciones de recursos-fines. Los fines son definidos por la Constitución, la Ley formal y las derivadas de los diagnósticos concretos. Los recursos son derivados del esfuerzo social vías la recaudación impositiva y acciones de prestación de servicios o de producción y devienen en financieros y materiales. Tales recursos se generan, regularmente, por acción misma de las Instituciones o por transferencia del Gobierno Nacional o por operaciones de crédito interno y externo.
Los gobernantes evaluarán las necesidades de las poblaciones de su jurisdicción, priorizarán la asignación de recursos, impondrán ventajas y sacrificios a sus poblaciones por la determinación de las políticas, generando disposiciones de legislación formal y de ejecución, de acuerdo a las competencias legalmente definidas. En este ámbito, corresponde a los titulares de gobierno, como miembros de los cuerpos colegiados o en ejercicio de las facultades ejecutivas, disponer, fiscalizar y sancionar políticamente. Esto quiere decir que no pueden asumir funciones que queden fuera de los marcos de esas competencias. Aprueban y evalúan los planes material y financieramente. Algunos reconocen esta función como el nivel estratégico. Responden, finalmente ante el pueblo, independientemente que pueden tener responsabilidades políticas, penales y civiles.
El rol de la Administración
Es la función dirigida a adecuar los recursos hacia los fines por procesos y procedimientos formalmente estipulados y aplicación de metodologías tecnológicas, gerenciando la actividad institucional, reglando la actividad de los cooperadores y transformando los medios en fines, de modo eficiente, eficaz y oportuno. Sustancialmente es tomar decisiones ajustadas a la normatividad y dentro de los límites de sus competencias discrecionales, es decir, interpretando la legislación y las políticas formalmente consideradas y transformándolas en directivas y acciones concretas. Elaboran los diagnósticos y proyectan técnicamente los planes y programas de acción que se ha de formalizar por el Gobierno institucional. Formalizados ajustarán sus acciones de modo razonable a los procedimientos legalmente definidos y esto no es tan simple como, generalmente se cree; pues, muchas de las acciones dependen de decisiones de la Administración Nacional que suben y bajan pasando por el nivel estratégico, ya que la Administración es el nivel táctico y de gerencia. Los cuadros administrativos deben configurarse con personal, objetiva y democráticamente seleccionado y sin vinculaciones a los negocios personales de Gobernantes o Funcionarios administrativos.
La Sociedad Civil (SC)
Si la Administración Pública (Gobierno y Administración) es un sistema abierto de interacción, democráticamente resulta incoherente el separarla de la Sociedad Civil, cuyas necesidades de crecimiento y de desarrollo ha de cubrir. Los gobernantes y, especialmente, los cooperadores o empleados están al servicio de la Sociedad Civil, cuyos impuestos y contribuciones los hacen posible. El divorcio que en algún tiempo existió y la ausencia de la presencia de la SC en asuntos públicos se han subsanado con diversos medios de participación ciudadana en el control social de la Administración pública. Aquí sólo queremos mencionar la Audiencia Pública que ha de ser una práctica del Gobierno municipal, particularmente en eso del paseo peatonal, curiosidad a imitar lo de ciudades con otras posibilidades tecnológicas; el Periodo de Información Pública, acceso a la Información, el Presupuesto Participativo, particularmente el Municipal que tiene que ver con los vecinos, sin excluir lo Regional. En fin otros conocidos que tienen que ver con el concepto de Democracia Directa. Todos éstos serán materia de otro tema.
Guillermo G. Guerra C
Abogado
El rol de la Administración
Es la función dirigida a adecuar los recursos hacia los fines por procesos y procedimientos formalmente estipulados y aplicación de metodologías tecnológicas, gerenciando la actividad institucional, reglando la actividad de los cooperadores y transformando los medios en fines, de modo eficiente, eficaz y oportuno. Sustancialmente es tomar decisiones ajustadas a la normatividad y dentro de los límites de sus competencias discrecionales, es decir, interpretando la legislación y las políticas formalmente consideradas y transformándolas en directivas y acciones concretas. Elaboran los diagnósticos y proyectan técnicamente los planes y programas de acción que se ha de formalizar por el Gobierno institucional. Formalizados ajustarán sus acciones de modo razonable a los procedimientos legalmente definidos y esto no es tan simple como, generalmente se cree; pues, muchas de las acciones dependen de decisiones de la Administración Nacional que suben y bajan pasando por el nivel estratégico, ya que la Administración es el nivel táctico y de gerencia. Los cuadros administrativos deben configurarse con personal, objetiva y democráticamente seleccionado y sin vinculaciones a los negocios personales de Gobernantes o Funcionarios administrativos.
La Sociedad Civil (SC)
Si la Administración Pública (Gobierno y Administración) es un sistema abierto de interacción, democráticamente resulta incoherente el separarla de la Sociedad Civil, cuyas necesidades de crecimiento y de desarrollo ha de cubrir. Los gobernantes y, especialmente, los cooperadores o empleados están al servicio de la Sociedad Civil, cuyos impuestos y contribuciones los hacen posible. El divorcio que en algún tiempo existió y la ausencia de la presencia de la SC en asuntos públicos se han subsanado con diversos medios de participación ciudadana en el control social de la Administración pública. Aquí sólo queremos mencionar la Audiencia Pública que ha de ser una práctica del Gobierno municipal, particularmente en eso del paseo peatonal, curiosidad a imitar lo de ciudades con otras posibilidades tecnológicas; el Periodo de Información Pública, acceso a la Información, el Presupuesto Participativo, particularmente el Municipal que tiene que ver con los vecinos, sin excluir lo Regional. En fin otros conocidos que tienen que ver con el concepto de Democracia Directa. Todos éstos serán materia de otro tema.
Guillermo G. Guerra C
Abogado
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Marcos Belopu