MERMELEROS

Por Willy Quevedo
El martes 23 de febrero apareció un suelto en el diario Correo donde afirmaban cuatro barbaridades sobre mi persona.
La publicacion apareció en la seccion de chismes politicos y me sorprendió aun más pues yo no soy regidor, alcalde, consejero, presidente regional, ministro de Estado, congresista, vicepresidente ni dirigente de mi partido el PPC.
Ayer en el boulevard de Asia me encontré con la mejor lobbysta de mi generacion. Luego de felicitarla porque su candidato a la alcaldia de Lima la sigue luchando. Dicho sea de paso perdí una apuesta tres días antes pues yo calculé que el aspirante declinaba el último día de febrero.
Con la confianza que le tengo a esta antigua amiga, le pregunte si sabia a que obedecia la campaña periodistica en mi contra. Muy suelta de huesos me contó que esa chiquita le costó dos mil dólares pues Aldito es su pata. De no ser así le hubiera costado mas.
Seguidamente le señalé que el jueves 25 del mes que pasó, el diario mencionado antes se rectificó en todas sus imputaciones sobre mi persona. Por lo tanto, le recomende que exija al director que le devuelva la plata.
- “Ay Willito, ¿tú crees que me voy a pelear con Mariategui en plena campaña electoral?”, me respondió.
A veces se gana y otras se pierde, reflexiono oportunamente.
Entonces, le retruque.
El martes 23 de febrero apareció un suelto en el diario Correo donde afirmaban cuatro barbaridades sobre mi persona.
La publicacion apareció en la seccion de chismes politicos y me sorprendió aun más pues yo no soy regidor, alcalde, consejero, presidente regional, ministro de Estado, congresista, vicepresidente ni dirigente de mi partido el PPC.
Ayer en el boulevard de Asia me encontré con la mejor lobbysta de mi generacion. Luego de felicitarla porque su candidato a la alcaldia de Lima la sigue luchando. Dicho sea de paso perdí una apuesta tres días antes pues yo calculé que el aspirante declinaba el último día de febrero.
Con la confianza que le tengo a esta antigua amiga, le pregunte si sabia a que obedecia la campaña periodistica en mi contra. Muy suelta de huesos me contó que esa chiquita le costó dos mil dólares pues Aldito es su pata. De no ser así le hubiera costado mas.
Seguidamente le señalé que el jueves 25 del mes que pasó, el diario mencionado antes se rectificó en todas sus imputaciones sobre mi persona. Por lo tanto, le recomende que exija al director que le devuelva la plata.
- “Ay Willito, ¿tú crees que me voy a pelear con Mariategui en plena campaña electoral?”, me respondió.
A veces se gana y otras se pierde, reflexiono oportunamente.
Entonces, le retruque.
- Querida Gaby, no crees que sería más sano que si deseas algo de mí me lo pidas directamente y no a través de presiones mediaticas?
Es decir, le estaba comunicando que la proxima vez me ofreciera esa plata a mí y yo decidiría si dejaba de atacar a su cliente.
“Claro que lo he pensado amiguito. El problema es que tengo decenas de clientes. Es más barato pagarle al periódico que darte a ti una cantidad por cada prospecto. Me saldría una fortuna alquilar tu silencio.
Oido esto me di cuenta por que mi amiga loretana es la más exitosa en el medio.
Es decir, le estaba comunicando que la proxima vez me ofreciera esa plata a mí y yo decidiría si dejaba de atacar a su cliente.
“Claro que lo he pensado amiguito. El problema es que tengo decenas de clientes. Es más barato pagarle al periódico que darte a ti una cantidad por cada prospecto. Me saldría una fortuna alquilar tu silencio.
Oido esto me di cuenta por que mi amiga loretana es la más exitosa en el medio.
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