CHISTOSOS

Por Willy Quevedo
Una de las tareas más nobles que existen es cambiar el humor a la gente. Arrancar sonrisas y provocar carcajadas es una actividad muy difícil. Por ello, los payasos, humoristas y comediantes perciben altas remuneraciones en todas las sociedades.
Hace unos días, el periodista Aldo Mariategui criticó al cómico Guillermo Rossini porque en su sintonizado programa radial imita al candidato Alex Kouri como si fuera maricón.
En apariencia el ataque del columnista obedece a que su patrón Baruch Ivcher no pierde oportunidad de golpear a sus competidores, considerando que el chistoso labora en el grupo mediático que dirigen Manuel Delgado Parker y su yerno Ernesto Schultz.
Sin embargo, Rossini goza del reconocimiento universal a razón de que transforma noticias reales en parodias que todo el mundo entiende. Él no va a arriesgar su exitosa reputacion lograda en décadas propagando mentiras. Por lo tanto, Rossini viene actuando correctamente pues nunca falta a la verdad.
Kouri ha sostenido relaciones íntimas con decenas de amigos cariñosos. Entre otros, los funcionarios de la región Callao, Victor Albrecht, Pepe Talavera y Mario Soza, el modisto Nino Peñaloza y el flete Jorge Glenny, hoy preso por haber asesinado al peluquero Marco Antonio.
Asimismo, el candidato ha tenido varios ingresos a emergencia de la clínica sanisidrina Angloamericana por desgarros propios del tercer sexo.
Sería muy desagradable que en los siguientes días se publiciten fotos y videos del candidato en frotaciones contranatura.
Lo aconsejable es que aprovechando la ventana abierta por Jaime Bayly, Kouri admita públicamente su homsexualidad, que con el tiempo ha devenido en un simpático mercado electoral.
La ciudadanía apreciaría ese gesto de valentía y sinceridad. Kouri arruinaría el negocio de los extorsionadores que lo chantajean porque conocen su secreto y podría continuar aliviado su campaña electoral.
Rossini residió en el distrito de Breña durante su infancia y juventud y estudió en el colegio Salesiano. A. Mariátegui ha vivido en Miraflores y es ex alumno del colegio Markham.
Rossini por haber experimentado calle puede oler un cabro a 50 metros. En cambio, Mariátegui frecuentemente se confunde y levanta travestis.
Una vez mas, la misia Breña le da lecciones a la presuntuosa Miraflores.
Una de las tareas más nobles que existen es cambiar el humor a la gente. Arrancar sonrisas y provocar carcajadas es una actividad muy difícil. Por ello, los payasos, humoristas y comediantes perciben altas remuneraciones en todas las sociedades.
Hace unos días, el periodista Aldo Mariategui criticó al cómico Guillermo Rossini porque en su sintonizado programa radial imita al candidato Alex Kouri como si fuera maricón.
En apariencia el ataque del columnista obedece a que su patrón Baruch Ivcher no pierde oportunidad de golpear a sus competidores, considerando que el chistoso labora en el grupo mediático que dirigen Manuel Delgado Parker y su yerno Ernesto Schultz.
Sin embargo, Rossini goza del reconocimiento universal a razón de que transforma noticias reales en parodias que todo el mundo entiende. Él no va a arriesgar su exitosa reputacion lograda en décadas propagando mentiras. Por lo tanto, Rossini viene actuando correctamente pues nunca falta a la verdad.
Kouri ha sostenido relaciones íntimas con decenas de amigos cariñosos. Entre otros, los funcionarios de la región Callao, Victor Albrecht, Pepe Talavera y Mario Soza, el modisto Nino Peñaloza y el flete Jorge Glenny, hoy preso por haber asesinado al peluquero Marco Antonio.
Asimismo, el candidato ha tenido varios ingresos a emergencia de la clínica sanisidrina Angloamericana por desgarros propios del tercer sexo.
Sería muy desagradable que en los siguientes días se publiciten fotos y videos del candidato en frotaciones contranatura.
Lo aconsejable es que aprovechando la ventana abierta por Jaime Bayly, Kouri admita públicamente su homsexualidad, que con el tiempo ha devenido en un simpático mercado electoral.
La ciudadanía apreciaría ese gesto de valentía y sinceridad. Kouri arruinaría el negocio de los extorsionadores que lo chantajean porque conocen su secreto y podría continuar aliviado su campaña electoral.
Rossini residió en el distrito de Breña durante su infancia y juventud y estudió en el colegio Salesiano. A. Mariátegui ha vivido en Miraflores y es ex alumno del colegio Markham.
Rossini por haber experimentado calle puede oler un cabro a 50 metros. En cambio, Mariátegui frecuentemente se confunde y levanta travestis.
Una vez mas, la misia Breña le da lecciones a la presuntuosa Miraflores.
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