RAFAEL BELAUNDE ¿EL OUTSIDER DEL 2011?

Por Raúl Mendoza Cánepa*

Hace un par de años, el periodista César Hildebrandt escribió un interesante artículo en el diario La Primera señalando que el escenario ideal del 2011 es uno en que Rafael Belaunde y Yehude Simon compiten en la final. “Si el Perú fuera un país menos aluvional, (decía) en la derecha del 2011 estaría Rafael Belaunde, que tiene ideas y las tiene claras, compitiendo con Yehude Simon, que podría encarnar una socialdemocracia de los tiempos de Google”. Vale decir que cuando Hildebrandt escribía el artículo, aún Simon no asumía el premierato y no era “quemado” por “Bagua”.

El periodista esgrimía sobre Belaunde: “Lo que sí sé es que él es de las pocas cosas buenas y prometedoras que le han ocurrido a la política peruana. ¡Y pensar que estuvo callado tantos años sólo por no contrariar a su padre!”

En efecto, Belaunde tiene partido inscrito (Adelante) y será seguramente el protagonista político de los próximos años. Si bien cree en el libre mercado, insiste en reformas institucionales que propicien un Estado al servicio de la gente. Su máximo interés es quitarles el país a los políticos para dárselo a la gente. Quebrar las castas y eliminar los privilegios. Como tal, Belaunde es un antisistema (dentro de la democracia). Conoce al dedillo el Perú, tiene una concepción clara de obras públicas e infraestructura (es ingeniero experto en estos temas) y una visión geoestratégica del país.

Propone liberar las fuerzas productivas y romper los diques legales que impiden crear riqueza. Su apuesta es por el empoderamiento del ciudadano de la provincia. Asume como necesario que el poder real lo tengan las provincias y más precisamente la gente de las provincias.

Insiste en la creación de 120 distritos electorales para que cada uno de estos elija a su representante en el Congreso. Así, distritos grandes o provincias densamente pobladas como Chimbote, el Santa (Ancash), Comas o San Juan de Lurigancho (Lima) y muchos otros más en todo el país tengan la posibilidad de tener un congresista para un mejor control. Reclama el recorte del mandato parlamentario a dos años y medio.

Actualmente hay algunos outsiders potenciales en el ruedo, desde el General Donayre al Cura Arana; desde PPK a Bayly. Desde Simon a Mercedes Araoz. Lo que Belaunde tiene, a diferencia de ellos, no sólo es la marca del apellido de su padre, que fue un gobernante honesto (Fernando Belaunde) sino, especialmente, la capacidad de gobierno y la habilidad para transmitir esa capacidad cada vez que lo entrevistan. Con mayor difusión, podría empezar a salir en las encuestas y sumar adhesiones.

En un escenario en el que la derecha está sobrecargada y en el que la izquierda espanta a muchos, Belaunde parece anunciarse como una carta nueva ni a la derecha ni a la izquierda. Su discurso rompe esquemas y parece salirse del de la propia clase política derechista, a quienes Belaunde suele criticar.

Hace algunos años, escribí en el diario Correo, antes que todos sobre las posibilidades de Ollanta Humala (cuando éste bordeaba aún el 1% y nadie me creyó). Belaunde es ahora quien podría asomar, convendría poner atención en este novedoso y aún potencial outsider.

*Abogado y periodista