JOSÉ ANTONIO ÑIQUE DE LA PUENTE Y UNA TAREA PENDIENTE

Por Roberto Alvarado Rubiños

Por primera vez en la historia un hombre noble e integro, en el mejor sentido de la palabra, llega al Decanato del Colegio de Abogados de Lima (CAL) a servir. Más de cuatro décadas de vida así lo confirman.

José Antonio Nique de la puente es uno solo, como él lo ha reconocido ante la prensa. El mismo mozuelo que se unió a la lucha por la libertad y la defensa de los derechos humanos en las cruentas luchas de la década del 60 del siglo pasado, hasta el maestro universitario y decano de la facultad de derecho de la universidad nacional mayor de san marcos, cuyas preclaras orientaciones contribuyen a forjar nuevos hombres y mujeres de buena voluntad.

Su ejecutoria de trabajar y luchar junto al pueblo ha sido tesonera y consecuente, así como reconocida. Desde su liderazgo juvenil hasta su señera orientación de maestro de juventudes hay una línea, una cuerda principal, como lo diría el genio de Tréveris, el abogado de la humanidad: "la lucha" por conquistar lo nuevo y lo justo.

Ñique es hijo de San Marcos, aquel gimnasio del pensamiento, donde el pueblo se ganó el derecho a la libertad de pensar y criticar; aprendizaje que sabrá aplicarlo entre los abogados, para que no sean meros aplicadores de la ley, sino creadores de derechos, como expresión de la realidad circundante.

La patria vive momentos críticos, que reclaman urgente solución. Se necesita una propuesta, hombres e instituciones que propugnen la transformación de este injusto e irracional orden de cosas. Reto que Ñique deberá enfrentar y cumplir, con la grandeza que reclaman quienes confían en él. Nada más decepcionate sería que, luego de tanto ruido, no se cumpla con lo prometido.

Si hay algo que nos diferencia de la derecha y sus corifeos es que somos transformadores, y como productores tenemos una moral superior a quienes parasitariamente viven del trabajo ajeno. Por ello, somos pensantes y operantes, como decía el amauta, y porque “todo acto o voz genial viene del pueblo y va hacia él”, anhelamos que nuestro amigo y compañero de batallas por la justicia, tenga éxito en su gestión como decano del CAL, para bien de los abogados y el pueblo.