SLOGANS


Por Willy Quevedo

En los procesos electorales la ciudadanía se moviliza. Las ideas motivadoras se sintetizan en frases que resumen la oferta de campaña. La elección de un buen slogan es una de las decisiones más importantes de los aspirantes a un cargo público.

Revisando la historia limeña, diversos han sido los lemas utilizados por las agrupaciones políticas. Lemas rítmicos, versos musicales y otros no tan poéticos condensaron un instante de la lucha por el poder en el país.

En 1963, la preocupación central fue la inflación. María Delgado Matallana escogió dos estribillos "con doña Maria no habra carestía" y "contra el alza de las subsistencias". Luis Bedoya Reyes vencio con las consignas "Bedoya te llenará la olla" y "Bedoya, el alcalde que necesitamos".

En 1966, el tema fue la evaluación de la gestion municipal. Jorge Grieve Madge recurrió a las expresiones "terminaremos bien las obras que empezaron mal" y "el parlamento no es obstruccionista". Bedoya logró la reelección voceando los coros "Lima apoya a su alcalde Bedoya", "Bedoya está trabajando, que no lo interrumpan" y "el hombre activo para una obra grande". Además promovio su apodo ‘Tucán’.

En 1980, Ricardo Amiel empleó la oración " Lima, porque te conozco, te quiero bien". Eduardo Orrego ganó con el slogan "Orrego es acción y la solución para cada problema". Justo Debarbieri utilizó dos lemas "limpieza en todo" y "sabe porque enseña".

En 1983, Amiel coreó "tu voto seguro, tu voto con futuro". Alfredo Barnechea empleó la palabra Sí. Alfonso Grados recurrió a la expresion "el voto que construye". Alfonso Barrantes triunfó con el lema "una Lima para todos". Asimismo difundió su sobrenombre el tío frejolito.

En 1986, Barrantes manejó los slogans "Lima ya tiene un buen alcalde" y "hoy más que antes, el pueblo con Barrantes". Bedoya utilizó la enunciación "Bedoya,el alcalde con capacidad y decision". Jorge Del Castillo venció con el lema "juntos, el pueblo, el municipio, el gobierno".

En 1989, Ricardo Belmont aventajó con dos consignas "el pueblo lo quiere" y "obras si, palabras no". También vulgarizó su apodo ‘Hermanón’. Juan Inchaustegui usó la frase "Inchaustegui sabe como". Henry Pease respondió con el slogan "el pueblo sí sabe como".

En 1993, Belmont fue reelecto con el coro "Belmont no promete, cumple". Luis Cáceres usó la oración "por una ciudad limpia y ordenada".

Esperamos que estas memorias ayuden a los nuevos postulantes a diseñar mejor sus estategias de cara a las proximas elecciones regionales.

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