UNIVERSIDAD E INVESTIGACIÒN

Por Víctor Hugo Chanduví Cornejo

Quiero compartir el día de hoy algunas reflexiones sobre la Universidad y la investigación, temas abordados en el Seminario Internacional sobre el Rol de la Universidad en el siglo XXI, organizado por el Curatorium de Doctores del Perú, en la ciudad de Lima los días 4 y 5 de abril de los corrientes.

La universidad peruana tiene múltiples y urgentes acciones que llevar a delante para responder a las necesidades de la sociedad en la que desenvuelve su tarea académica. Además justificar su existencia y razón de ser. Los importantes roles que la universidad ha cumplido en el pasado han sido abandonados o dejados de lado para abocarse casi exclusivamente a su tarea de formación profesional o a satisfacer las exigencias inmediatas del mercado. Es urgente que la universidad recupere su alta misión humanística y priorice la investigación.

Efectivamente, la investigación, la transmisión de conocimientos y la formación profesional, como objetivos ecuménicos de la universidad, no han recibido la misma prioridad en la universidad. La universidad peruana ha dedicado sus esfuerzos a la formación profesional y ha descuidado su labor de investigación que constituye su misión principal. Autoridades y profesores universitarios reconocen la importancia plena de la investigación, pero en la distribución de la carga académica prima la tendencia de dedicar al profesor más a la enseñanza que a la investigación, por cierto que no todos los profesores tienen la capacidad ni la vocación para esta misión, pero hay que dotar de los recursos necesarios y las facilidades del caso para aquellos que quieran dedicarse a esta noble tarea.

La universidad peruana no se comporta como centro generador de nuevos conocimientos, la investigación no se ha institucionalizado todavía como quehacer permanente, a pesar que siempre se reclama en los discursos de las autoridades académicas. Todavía no se le reconoce como valor cultural ni se le da importancia que tiene en la universidad moderna. Por tal motivo es urgente replantear esta situación asignando los recursos necesarios para privilegiar la investigación dentro de un nuevo paradigma de la economía del conocimiento, de lo contrario la universidad Peruana no va a resolver problemas relevantes concretos como: la competitividad industrial, el desarrollo científico-tecnológico, la cobertura y calidad de la educación o la reforma de la educación superior.

Sin investigación no es posible vida digna en un mundo cada vez más pequeño y globalizado.