ORNATO

Por Willy Quevedo

Esta semana un alcalde distrital que postula a la reelección fue denunciado por ordenar podar un antiguo árbol que ocultaba uno de sus carteles de propaganda.

Las trasnacionales Telefónica, Edelnor y Luz del Sur están autorizadas a podar árboles para evitar averías, desconexiones, corto circuitos y apagones.

El mundo al revés. La conservación de la naturaleza está subordinada a intereses electorales y a planes de ahorro de gastos en empresas de servicios públicos.

Los cables eléctricos y telefónicos se apoyan en postes, techos y fachadas de edificaciones y se despliegan a lo largo y cruzando calles y avenidas produciendo contaminacion visual.

Los pilares de concreto están peligrosamente doblados e inclinados porque adicionalmente cargan cajas terminales y elementos de transmisión y ferreteria.

Asimismo, los postes ocupan un area de las veredas. Por ese hecho, las autoridades ediles están obligados a solicitar una tasa por derecho de servidumbre.

Lastimosamente, la mayoría de los alcaldes no cobran esos montos a las grandes empresas porque se dejan sobornar.

Los candidatos a burgomaestres deberían ofrecer una ciudad ordenada y bella. Por lo tanto, están obligados a prometer erradicar del espacio público las horribles redes aereas de telecomunicaciones y electricidad.

Logicamente, este deseo de la ciudadanía choca contra los intereses de los concesionarios extranjeros. Retirar los hilos conductores aereos y cambiarlos por una instalacion subterranea cuesta cientos de millones de dólares.

Esperamos que no se les ocurra hacernos pagar esa inversión a los usuarios.

Los únicos beneficiados con la telaraña en altura, además de las codiciosas Telefónica, Luz del Sur y Edelnor son las ardillas y las palomas que transitan.